
Lévy-Bruhl y la lógica de lo místico
Lévy-Bruhl fue, ante todo, un filósofo. Aunque no ajeno a las preocupaciones de la sociología de su tiempo —y contemporáneo, incluso colega, de Durkheim— su atención no se centró en las instituciones, sino en las formas de pensamiento. Lo que le interesaba no era tanto cómo vivían los hombres, sino cómo pensaban. Y no cómo pensaban los sabios, sino aquellos