El mundo del cuidado facial ha encontrado una nueva forma de acercarse a las rutinas de belleza mediante la comparación con las tareas domésticas cotidianas. Expertas en dermocosmética de marcas reconocidas como Byoode, Omorovicza y Medik8 sugieren que entender y aplicar una rutina efectiva para el cuidado de la piel puede ser tan sencillo como llevar a cabo una limpieza doméstica eficiente.
La esencia de esta analogía radica en la relación entre la limpieza del rostro y el cuidado del hogar. Según Lara González, cosmetóloga de Byoode, una doble limpieza facial es indispensable para eliminar completamente las impurezas superficiales como el maquillaje y la contaminación. Comparándolo con el barrido y fregado de un suelo, recomienda comenzar con un limpiador oleoso para abordar suciedades más resistentes, seguido de un gel limpiador facial. Marta Agustí, directora de dermocosmética en Omorovicza, respalda esta perspectiva.
Asimismo, Raquel González, directora técnica de Perricone MD, ofrece un enfoque práctico al comparar la limpieza facial con la de una sartén grasienta. Recomienda utilizar agua tibia a 30ºC, enfatizando su eficacia para eliminar aceites y maquillaje sin dañar la barrera cutánea. Esto resulta crucial para asegurar una limpieza profunda y efectiva.
En cuanto a la absorción de productos, Mireia Fernández de Boutijour destaca que la piel, similar a una esponja, absorbe mejor los activos cosméticos cuando se encuentra ligeramente húmeda. La aplicación de tónicos y sueros de ácido hialurónico tras la limpieza maximiza esta capacidad, garantizando una hidratación más profunda y eficaz.
Además, el orden de aplicación de productos cosméticos guarda semejanzas con el proceso de encerar un suelo de parqué. Estefanía Nieto de Medik8 explica que los productos deben aplicarse de acuerdo con su densidad, comenzando por los más ligeros y finalizando con los más pesados. Este enfoque asegura que los tratamientos sean absorbidos de manera óptima por la piel, protegiéndola y nutriéndola adecuadamente.
Las expertas sugieren productos específicos para cada paso del proceso. El bálsamo limpiador antibacteriano «Metamorphosis of Narcissus» de Byoode ofrece una limpieza profunda, mientras que el limpiador exfoliante «Gentle Buffing Gelée» de Omorovicza y el suero «Snow Lotus Lifting Serum» de Boutijour proporcionan beneficios adicionales que complementan la rutina de cuidado.
Con estas comparaciones, las profesionales del cuidado de la piel buscan simplificar y hacer más accesible la rutina facial diaria, promoviendo hábitos que ayudan a mantener una piel sana y radiante. Así, cuidar nuestro rostro se convierte en una experiencia metódica y satisfactoria, asemejándose al confort que brinda un hogar limpio y ordenado.